La reducción de la jornada laboral de 48 horas a 40 horas a la semana no es prioridad en el Poder Legislativo en estos momentos, pero va a suceder, no podemos cerrar los ojos a este proceso.
“Los industriales no nos negamos a esta reducción, sabemos que esta iniciativa es parte de los acuerdos del T-Mec”, sostuvo Esperanza Ortega Azar, presidenta de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA).
Sin embargo, la empresaria advirtió que el costo de la reducción laboral es entre 10 y 20% y que impactará al consumidor final, “tenemos que ver las cosas reales; no se le puede cargar a la industria porque los índices de ganancia no son elevados para poder ser competitiva”.
Desde mayo de 2023, los afiliados a la CANACINTRA comenzaron a prepararse para elevar la productividad en las empresas y propuestas para hacerle frente a la reducción de jornada laboral. Consideran modificar las jornadas de lunes a sábado para darles esa reducción de horas a las personas trabajadoras.
Además, consideran que las micro y pequeñas empresas no tendrán estos impactos porque son familiares y no aplicarán la reducción de jornada laboral, ya que casi no tienen contratados trabajadores externos.
Sobre el salario mínimo, recordó que recientemente se dio a conocer que pasará de 207.44 a 248.93 pesos diarios (7 mil 508 pesos mensuales); mientras que en la Zona Libre de la Frontera Norte pasará de 312.41 a 374.89 pesos diarios (11 mil 413 pesos mensuales), pero hay que recordar que en la industria se pagan pocos salarios mínimos, se pagan salarios semi profesionales y profesionales, señaló.
Agregó que se necesita una política industrial segura y una nueva ley, porque ya es obsoleta la que se tiene en estos momentos en México. Para el próximo proceso electoral del 2024, pidió fortalecer el mercado interno y que se contraten los bienes y servicios del sector industrial mexicano.
La CANACINTRA, que agrupa 14 sectores, está presente en 30 estados del país, menos Nuevo León y Jalisco, con 76 delegaciones; pronto presentará una propuesta para impulsar una nueva política industrial. “La cámara no es apolítica, pero sí apartidista. Las puertas están abiertas para todos los candidatos que así deseen venir a plantear sus propuestas, pero también a llevarse las nuestras”, refirió Ortega Azar.
Además, compartió que este 2023 hubo un avance lento y pequeño en el sector industrial, que es necesario invertir para que la industria pueda ser competitiva y no se incremente la informalidad, que en el país alcanza un 59 por ciento.
Perspectiva de género
Sobre la agenda femenina que impulsa la CANACINTRA, refirió que en 82 años ella es la segunda mujer en presidir este gremio y que en los últimos 15 años se ha trabajado en visibilizar las aportaciones de las mujeres. Como ejemplo, dijo que desde el 25 de noviembre se unieron a los 16 días de activismo para impulsar reuniones con mujeres afiliadas.