La vivienda usada está tomando cada vez mayor relevancia como una alternativa más accesible y barata que impulsa la recuperación de inmuebles, dinamiza la economía local y preserva la identidad de las comunidades.
De acuerdo con datos de la Sociedad Hipotecaria Federal (SHF), la vivienda nueva presentó una variación positiva de 8.2%, mientras que el correspondiente a la vivienda usada aumentó 8.6% en el periodo enero – junio de 2025.
En este periodo se observó una proporción de viviendas usadas de 63.3% y 36.7% de viviendas nuevas.
En la CDMX, las fuertes alzas en el valor por metro cuadrado en colonias como Roma, Condesa o Juárez —de entre 73% y 177% en la última década— son reflejo de un fenómeno claro: alta demanda frente a una oferta limitada.
Generalmente, las propuestas para reducir los precios se han centrado en incentivar la construcción de vivienda nueva o en proponer controles de precios.
Sin embargo, existe otra opción para disminuir la presión de los precios.
Gran parte de la oferta permanece “bloqueada” por trámites complejos, falta de transparencia y procesos burocráticos que frenan el mercado y limitan el acceso de las familias a opciones asequibles.
Liberar el potencial de la vivienda usada mediante procesos más ágiles y claros de compraventa no solo permitiría ampliar la oferta y aliviar presiones en los precios, sino también impulsaría la revitalización de barrios como Santa María la Ribera o Doctores, donde la incorporación de vivienda usada ha traído beneficios como mayor apertura de comercios, conservación arquitectónica y un entorno urbano más seguro.
En este contexto, Tuhabi, la proptech líder en compraventa de vivienda usada en América Latina, está desempeñando un papel clave al liberar el potencial atrapado en este mercado mediante procesos digitales que aportan confianza y velocidad.
Su modelo:
- Elimina la opacidad y la burocracia, otorgando visibilidad al valor real de los inmuebles.
- Genera liquidez inmediata para familias que necesitan transformar su patrimonio en recursos disponibles, sin esperar meses en trámites.
- Reduce los tiempos de vacancia, conectando de forma más rápida a vendedores con compradores.
- Facilita el acceso al crédito hipotecario, al trabajar en conjunto con instituciones financieras públicas y privadas para simplificar la formalización de las operaciones.
- Incentiva la remodelación, devolviendo al mercado viviendas habitables y revitalizadas que reactivan la vida en los barrios.
“En Tuhabi trabajamos para que la vivienda usada sea más accesible y transaccional. Nuestro modelo basado en tecnología y apalancado en inteligencia artificial ofrece transparencia en cada paso, impulsa la movilidad del mercado y abre la puerta a que más familias encuentren un hogar en zonas con infraestructura y vida comunitaria consolidadas”, señaló Juan Carlos Hartasánchez, director de Asuntos Corporativos y Políticas Públicas de Tuhabi.
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