Para enfrentar el inicio de año, es posible que los hogares y personas aumenten el uso de la tarjeta de crédito para compras físicas y en línea. Usar el crédito en periodos de emergencia es una opción excelente, solo que hay que hacerlo con los cuidados suficientes para proteger nuestra información y no ser víctima de algún delito.
Iniciando 2024, la mayoría de la población trae la “resaca” de los gastos de diciembre, vive los tradicionales incrementos de precios y los pagos de servicios anuales como predial o agua.
Es una época retadora para consumidores porque existe la tentación de echar mano de compras a crédito y compras en línea de forma apresurada, por lo que es muy importante observar las medidas de seguridad para no descuidarnos con el sentido de urgencia. Algunas de las más básicas son:
- Nunca hay que compartir información sensible, como contraseñas y otros datos personales.
- Jamás acceder a correos electrónicos o mensajes SMS de dudosa procedencia y no solicitados donde promueven grandes ofertas de crédito.
- Comprar en línea solo en sitios seguros.
Durante 2022, la Guardia Nacional dio a conocer que, entre los principales tipos de fraude en línea detectados, se encontraron las páginas falsas y los correos apócrifos para obtener información bancaria personal. Mientras que, en 2023, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef), alertó sobre una nueva modalidad de fraude a través de transferencia electrónica.
El fraude a las tarjetas de crédito, derivado del uso no autorizado de la información, es uno de los delitos más comunes de robo de identidad, que afecta no solo al titular de la tarjeta, sino también, a los comercios, ya que se generan cancelaciones y pérdida de confianza por parte de los consumidores.
Hay todo un esquema de ingeniería social para robar información, así que se debe desconfiar de cualquier mecanismo donde se soliciten datos. Los defraudadores pueden obtener datos personales a través de correos electrónicos (phishing), mensajes de texto (smishing) o llamadas (vishing).
La seguridad de los sitios web, es otro aspecto indispensable para tomar en cuenta al hablar de ciberseguridad, por lo que se debe verificar la autenticidad de los sitios de comercio electrónico, corroborando que el sitio comience con “https://” y que contiene el ícono de candado junto a la dirección de la página web.
Sin embargo, si eres víctima de fraude a través de la tarjeta de crédito, es primordial llamar inmediatamente a la institución bancaria para reportar el incidente y, de ser posible, bloquear las tarjetas desde la aplicación del banco. Asimismo, y para evitar que se cometa cualquier delito utilizando la información del tarjetahabiente, se debe realizar una denuncia ante el Ministerio Público y resguardar toda evidencia digital mediante capturas de pantalla, así como conservar direcciones de páginas web relacionadas.
Aún queda camino por recorrer para consolidar una cultura de ciberseguridad en México. Sin embargo, impulsar las medidas antes mencionadas no sólo ayudará a que los fraudes cibernéticos disminuyan, sino que también dará tranquilidad sobre el uso de medios financieros para hacer transacciones.